Crítica.Place Vendôme. Streets of fire

PLACE VENDÔME: “Streets of paradise” (Frontiers):

De la mano del reputado sello melódico italiano y de nuevo con Dennis Ward y Michael Kiske como principales protagonistas del proyecto (además de la base rítmica de PINK CREAM 69 como músicos base), aquí tenemos la continuación al exitoso debut de PLACE VENDÔME de en 2005. Aquel fue un trabajo que si bien cosechó críticas excelentes y además levantó una increíble expectación por tener al conocidísimo y eterno ex cantante de HELLOWEEN (por mucho que le moleste que se lo recuerden constantemente al propio Kiske) en su filas haciendo lo que ahora más le gusta: rock/AOR, no dejaba de ser un "simple" buen disco de hard rock melódico. En la misma línea continúa este segundo trabajo, tres años y pico después, con una buena colección de temas roqueros, con excelentes melodías y detalles exquisitos vocales, pero que no termina de enganchar al 100% a no ser que seas fan irredento de los sonidos más "aoreros". Pero que nadie malinterprete mis palabras, que el disco tiene mucha clase y un excelente y delicioso guiño comercial de ese que a veces se echa de menos en estos lanzamientos.

De todas formas, siempre habrá los que sólo por tener a Michael Kiske como cantante de la "película" (que lo hace muy bien, las cosas como son) ya digan que el disco es la octava maravilla (al igual que se dijo del primero), pero la verdad es que yo sigo pensando que estos trabajos necesitan más chicha, fuerza y movimiento para realmente convencer y encantar fuera del mero mercado melódico. Eso sí, los temas son buenos, la voz de Kiske está en gran forma (cantando muy melódico aunque el feeling y buen gusto lo sigue manteniendo intacto), la producción es excelente (que estamos hablando de un grande como el señor Ward), e incluso la portada me ha gustado mucho. Como ligera variación con respecto al primero, noto incluso un giro más pronunciado hacia ese sonido característico de bandas como JOURNEY o TOTO en algunos cortes concretos como la propia "Streets of fire" o la netamente ochentera "Valerie", que es maravillosa. Aparte de estos dos, de los más interesantes, me quedo quizás con los cortes más netamente roqueros como pueden ser "Follow me" o la genial "Dancer", además de la pegadiza y comercial "Believer", la genial y hardroquera "Surrender your soul", o el bonito medio tiempo "My guardian angel", potencial hit single y que se te queda en la cabeza desde el principio, aunque por otro lado no termino de digerir la sobredosis de almíbar aplicada a las baladas. En definitiva, me gusta más este segundo trabajo que el primero, la verdad. (David Esquitino)