Crítica. Saratoga. VII

Saratoga. VII (Avispa):

Nueva formación para una banda ya clásica cuyos últimos discos no nos acababan de convencer. Cambios en un grupo que definitivamente han sentado bien a uno de los combos más admirados de nuestro país. Este "VII" recupera un sonido a caballo entre los Saratoga más cañeros con melodías mucho más asequibles y con momentos de auténtico lujo. Por supuesto el cambio en la parte vocal con la entrada de Tete Novoa es importante. Tete puede recordar a Leo en los tonos más agudos, pero su voz tiene matices diferentes, y además el juego continuo con los coros dulcifican en gran medida el falsete característico en la música de Saratoga. Tony Hernando se muestra como el gran guitarra que todos queremos oir, más allá de veleidades de "guitar hero", y su papel es sencillamente fantástico, incorporando líneas de guitarra hasta ahora nunca oídas en los trabajos anteriores del grupo. Y qué decir del excepcional trabajo de Niko del Hierro, tal vez el artífice principal de que Saratoga se haya mantenido y cuya presencia a lo largo de todo el disco es, sencillamente, indiscutible. Las composiciones, variadas, obligan a perderse con "Dueño del Aire" y sus geniales coros, "El guardián" una muestra perfecta de cómo debe ser el Heavy metal cantado en castellano o "Sigues estando en mi vida", una balada nada edulcorada y plena de sentimiento. Brutal es también "Bailando con el diablo" con un riff poderosísimo que contrasta con la mucho más suave "En tu cuerpo" coqueteo casi con el Hard Rock más dulce. Eso sí, si queremos fiesta, "Huracán" es el tema. En definitiva un discazo de los antes, que nos muestra a unos Saratoga distintos, y que ofrece tanta variedad que simplemente hay que disfrutarlo, una y otra vez. Enhorabuena, así sí... (Fernando Checa)