Crítica: Kotipelto. Serenity
Tras un interesante y más oscuro y melódico “Coldness”, aquí tenemos el ya tercer trabajo en solitario del cantante de STRATOVARIUS, Timo Kotipelto. En este caso vuelve a contar con el bajista de su banda madre (si en los dos anteriores recurrió a Jari Kainulaen, ya ex de la banda, en este caso es Lauri Pörra, actual bajista de los fineses y que ya giró con Kotipelto en el tour de presentación del anterior disco), además de sus dos fieles escuderos Mirke Rantamen (bateria de THUNDERSTONE y WARMEN) y el teclista Jane Wirman (de COB y WARMEN) además del guitarrista Tuomas Wäinola. El disco se llama “Serenity” y es un trabajo más vivo, sencillo y alegre que “Coldness” aunque, a su vez, mucho más monótono, aburrido y menos interesante que el anterior (precisamente bastante alejado y más “hardroquero” que a lo que nos tienen acostumbrados STRATOVARIUS). En este caso brilla el power metal aunque con esos retazos progresivos que parece que son la tónica de moda en estos tiempos. Además, esta vez el protagonismo, además de la voz del rubio vocalista, está sin duda en el teclado de Jane, detalle que siempre me parece negativo pues seguiré defendiendo hasta la muerte que un teclado en una banda de rock es un instrumento melódico, de fondo y ambiental, pero nunca principal. Total, que aparte de una bonita portada y algún tema intresante como el single “Sleep well” o la más extensa y variada “Last defender”, el disco me ha dejado muy frío… Será que me hago mayor y este estilo se me ha quedado muy atrás pero lo cierto es que “Serenity” me parece objetivamente bueno pero subjetivamente con poca chicha e interés. (David Esquitino)
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